Objetivos educativos

“La misión del ajedrez en las escuelas no es la erudición de sacar maestros de ajedrez. La educación mediante el ajedrez debe ser la educación de pensar por sí mismo”.
(Emmanuel Lasker, campeón del Mundo de 1894 a 1921)

Los objetivos que se pretenden conseguir con el ajedrez escolar no tienen nada que ver con los objetivos del ajedrez de competición. No se pretende por tanto formar grandes campeones, sino utilizar el ajedrez buscando una mejora en el rendimiento académico de los estudiantes, a través del desarrollo de habilidades cognitivas como la memoria, la capacidad de concentración, la agilidad mental, la capacidad de análisis y síntesis, la toma de decisiones y la aceptación ante el error, la atención, la reflexión, la visión espacial de la realidad, la resolución de problemas, el razonamiento lógico-matemático, el pensamiento creativo, la autoestima, el sentido de logro, la capacidad crítica, la iniciativa, la empatía, etc. Además, se aprende a aceptar los propios errores no como una forma de fracaso o castigo, sino como un medio de motivación para corregirlos y salir adelante.

En definitiva, el ajedrez escolar pretende "enseñar a pensar"; al mismo tiempo que cubre otras facetas importantes para el desarrollo integral del niño, puesto que el ajedrez escolar se puede enfocar desde tres perspectivas distintas pero que se complementan:
  1. El ajedrez como juego, ya que es una actividad recreativa y placentera
  2. El ajedrez como medio de desarrollo del pensamiento
  3. El ajedrez como medio de socialización

En concreto, entre los objetivos específicos que se pueden conseguir con el ajedrez destacan:

  • Desarrollar la memoria
  • Trabajar la agilidad mental
  • Aumentar la visión espacial
  • Potenciar el pensamiento creativo
  • Fortalecer la autoestima y el sentido de logro
  • Desarrollar la empatía
  • Desarrollar la atención y la concentración
  • Aumentar la orientación espacio-temporal
  • Mejorar la capacidad de análisis y síntesis
  • Potenciar la capacidad de razonamiento lógico-matemático
  • Desarrollar la creatividad y la imaginación
  • Acostumbrarse a respetar las normas
  • Valorar y respetar el silencio como fuente de concentración
  • Utilizar e interpretar correctamente códigos asociados al lenguaje ajedrecístico
  • Adquirir conocimientos relativos a la cultura general
  • Iniciarse y profundizar en el conocimiento del ajedrez, de sus elementos y normas básicas
  • Analizar sistemáticamente los problemas, utilizando procedimientos adecuados para obtener la información, seleccionarla, organizarla y utilizarla
  • Expresar de forma razonada contestaciones, conclusiones y soluciones de problemas
  • Valorar con antelación las ventajas e inconvenientes de una decisión, y planificar anticipadamente las respuestas a posibles situaciones
  • Responsabilizarse de los propios actos, reconociendo los aciertos y los errores cometidos y asumiendo las consecuencias positivas o negativas de las decisiones tomadas
  • Desarrollar la autoestima y superación, valorando el propio progreso en el aprendizaje, y adquiriendo un nivel adecuado de autoconfianza
  • Desarrollar la capacidad de autonomía, mediante la toma de decisiones individuales en el transcurso de las partidas
  • Incrementar la capacidad de decisión, mediante la elección entre varias alternativas en un tiempo limitado
  • Prevenir dificultades de aprendizaje desde edad temprana
  • Aumentar el control emocional y de la impulsividad, evitando acciones irreflexivas
  • Estimular la perseverancia en el abordaje de tareas y resolución de problemas
  • Analizar las cuestiones desde diferentes puntos de vista, situándose en la perspectiva del oponente
  • Acostumbrarse a realizar una crítica constructiva y positiva con intención de mejorar
  • Estimular la búsqueda de la belleza mediante la creación artística en el tablero
  • Disfrutar del proceso de razonamiento y del ejercicio mental mientras se practica el juego
  • Fomentar el desarrollo de relaciones interpersonales equilibradas y constructivas
  • Aceptar con deportividad el resultado de las partidas
  • Orientar el tiempo de ocio hacia actividades constructivas y creativas

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